Sufrir la pérdida del cabello durante una enfermedad, estrés o un tratamiento de quimioterapia suele ser traumático para quienes , por desgracia, sufren esta enfermedad.
Como sabemos lo importante que es la recuperación total del pelo os traemos una serie de remedios que, si bien no hacen milagros, os van a ayudar a que esa recuperación sea mucho más rápida.
Regenerar el pelo es una tarea lenta y difícil, no os vamos a engañar, pero con algo de paciencia y dedicación, se puede conseguir recuperar la salud capilar y con ello vuestra melena.
Cuando estamos sometidos a tratamientos tan agresivos como la quimioterapia o a situaciones fuertes de estrés por ejemplo, el pelo pierde fortaleza y nutrientes básicos para su correcto crecimiento, debido a la escaso crecimiento de sus células.
Esta pérdida del pelo unida al malestar general nos hace flaquear nuestro estado de ánimo, por eso os recomendamos que si pensáis que os va a venir bien, no dudéis en buscar una peluca de cabello natural que os haga ganar confianza y seguridad.
REMEDIOS PARA RECUPERAR LA SALUD CAPILAR.
MASCARILLAS.
De cafe.
Son muchas las propiedades del café, y una de ellas es la capacidad de ayuda al crecimiento y regeneración del cabello, exfoliando el cuero cabelludo, fortaleciendo su raiz y aportando brillo y textura.
Para la elaboración de esta mascarilla debemos unir 4 cucharadas de café molido, un vaso de agua mineral y un gorro de ducha de material impermeable.
Con estos ingredientes elaboraremos una taza de café caliente que dejaremos enfriar en lo que nos lavamos la cabeza de la manera habitual, intentando no secarlo estrujándolo con la toalla. Con retirar el exceso de agua vale.
Después aplicaremos el café por todo el pelo masajeando todo el cuero cabelludo y favoreciendo así la circulación sanguínea. Colocamos el gorro de ducha y lo dejamos actuar durante 20 minutos.
Para terminar tenemos que enjuagar la cabeza con agua fresquita, sin jabón, cepillarlo y dejarlo secar al aire.
De aceite de coco.
El aceite de coco es un producto de origen vegetal contiene múltiples vitaminas, minerales y proteínas que ayudan a fortalecer las raíces e hidratar las puntas del cabello maltratado.
Aplicar una mascarilla de coco es una manera fácil y nutritiva de cuidar tu pelo.
Debemos buscar aceite de coco de calidad, en la farmacia y aplicarlo durante una hora para enjuagarlo despues quitando el exceso de grasa, secándolo con mimo y al aire. ¿ La medida? Dos cucharadas de aceite de coco 100% natural por todo el cabello.
Tanto esta mascarilla de coco como la de café las podemos aplicar de una a dos veces por semana.
De aceite de ricino.
A nosotras personalmente es la mascarilla que más nos gusta ya que el aceite de ricino goza de grandes cualidades en la salud intestinal, pero también funciona muy bien para el cuidado capilar, de cejas y de pestañas.
El aceite de ricino contiene ácido ricinoleico, de aquí viene su nombre, un ácido que favorece al crecimiento natural del pelo. Pero no solo posee este ácido sino que también contiene: Vitamina E, un nutriente esencial del cabello; ácidos grasos que aportan hidratación y protección contra la caída y fortalecen los folículos capilares.
Se debe aplicar con cuidado puesto que el aceite es muy denso y no conviene utilizar gran cantidad.
Con el pelo húmedo lo aplicamos masajeando bien el cuero cabelludo, envolvemos el pelo en una toalla y lo dejamos actuar entre 20 y 30 minutos. Para retirar el aceite nos lavaremos la cabeza con un champú anticaída de manera suave hasta que eliminemos todos los restos de aceite, aclaramos con agua tibia y listo.
Debemos repetir esta operación entre una y dos veces por semana.
La alimentación.
Una buena alimentación será la mejor manera de complementar las mascarillas y fortalecer el pelo.
El folículo del pelo, para su buen funcionamiento, se tiene que regar con sangre rica en oxígeno. Para ello debemos ayudar al cuerpo alimentándonos con proteínas, vitaminas y minerales.
Se recomienda consumir pescados como merluza y lenguado, así como legumbres y verduras, todos ellos alimentos ricos en proteínas y hierro.
También col, brócoli o nabo por su contenido en vitamina A y tomates, verduras sin cocinar y huevos por su aporte de vitamina B.
No debemos olvidarnos de los cítricos como pomelo, naranjas o limones ricos en vitamina C.
Por supuesto en el tema de la dieta debemos hacer caso a nuestro médico o a nuestro dietista en todo momento.
Esperamos que si sufrís esta enfermedad o si necesitáis fuerza extra en vuestro pelo, estos consejos os ayuden y sea de utilidad. En nuestro salón siempre tendréis las puertas abiertas para ayudaros.
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